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CRS proveerá refugio, agua y saneamiento y apoyo psicológico a 20,000 familias.
Quito, Ecuador, 26 de abril 2016 – Después de facilitar la entrega de cinco toneladas de suministros muy necesarios este fin de semana, los equipos de Catholic Relief Services (CRS) en Ecuador se están preparando esta semana para ayudar a miles de personas a construir refugios de láminas de plástico y madera de origen local.
Con 10,000 lonas que se espera que lleguen a Quito a mediados de la semana, los equipos de emergencia de CRS tienen previsto iniciar la construcción de refugios para las familias que quedaron sin hogar por el terremoto de 7.8 grados que afectó a Ecuador el 16 de abril 2016, cobrando la vida de casi 700 personas e hiriendo a más de 12,000.
Los equipos de emergencia recorrieron unos 2,000 kilómetros de terreno costero muy afectado la semana pasada para determinar la magnitud de los daños y las necesidades inmediatas de los más afectados.
“La gente está comprensiblemente muy desconcertada,” dijo Thomas Hollywood, representante de CRS para América del Sur. “Las personas con las que hablamos, lloran o se frustran—no hay un punto intermedio—debido a tanta pérdida y tanta necesidad”.
Dijo que refugio, agua potable, suministros de higiene y sistemas de saneamiento y apoyo psicológico son las necesidades más importantes hasta el momento.
Hollywood, que era un miembro del equipo de CRS que respondió al terremoto de Perú en 2007, dijo que el daño es tan extenso en algunos lugares será necesario el reasentamiento completo. No sólo las viviendas han sido destruidas sino que también infraestructura importante como escuelas, hospitales e iglesias. En total, 7,000 edificios fueron destruidos en el terremoto y 26,000 personas necesitan refugio.
Más tarde esta semana, los equipos de CRS distribuirán las lonas y empezarán a ayudar a las familias a construir refugios que combinan las lonas con materiales locales como el bambú o caña de azúcar y techos de zinc. También entregarán kits de higiene que incluyen jabón y cepillos dentales a 800 familias en Esmeraldas y Manabí, dos de las provincias más afectadas.
CRS proveerá refugio, agua y saneamiento y apoyo psicológico a 20,000 familias.
Mientras tanto, CRS y Cáritas Ecuador están desarrollando planes para ayudar a las comunidades a reconstruir los sistemas de agua que fueron destruidos por el terremoto y construir letrinas. En las próximas semanas, también comenzarán a identificar formas de ayudar a las familias que dependen de la agricultura y la pesca a generar ingresos.
CRS ha trabajado en Ecuador desde la década de los sesenta. En los últimos cinco años, CRS ha invertido mucho en la capacitación de los miembros diocesanos de Cáritas en la detección de riesgos, planes de contingencia, ser los primeros en responder, y otras medidas en las zonas propensas a las inundaciones, la actividad sísmica, y las condiciones meteorológicas extremas. CRS también tiene programas en curso en las zonas afectadas con las Hermanas Misioneras Scalabrinianas que proporcionan ayuda humanitaria, psicológica, social y jurídica fundamental para los refugiados colombianos.
