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La agencia de ayuda de la Iglesia Católica hace eco de la postura de la USCCB sobre el nuevo límite de admisión de refugiados

BALTIMORE, MD, 19 de septiembre de 2018 – Catholic Relief Services (CRS) se suma a la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), por su sigla en inglés) al objetar el número históricamente bajo de refugiados a los que se les permitirá ingresar a los Estados Unidos el próximo año. El anuncio del lunes por la administración de limitar el tope de refugiados a 30,000 personas para el año fiscal 2019 sería el más bajo en la historia del programa de admisiones de refugiados de los Estados Unidos, que se estableció hace más de 30 años.

Al reaccionar ante las noticias, el monseñor Joe S. Vásquez, obispo de Austin, Texas, calificó el nuevo tope como “profundamente inquietante” y dijo que pondría en peligro muchas vidas como resultado.

El obispo Vásquez, quien preside el Comité sobre Migración de la USCCB, agregó: “Eliminar la protección para muchos que huyen de la persecución, en un momento de necesidad humanitaria mundial sin precedentes, contradice quiénes somos como país”.

Como la agencia internacional de ayuda y desarrollo de la comunidad católica de los Estados Unidos, CRS implementa programas que salvan vidas para apoyar a los refugiados de todo el mundo, desde los rohingya en Bangladesh hasta los sudaneses del sur en Uganda y los refugiados sirios en todo el Medio Oriente.

“Nuestro personal y socios se encuentran con los hombres, mujeres y niños obligados a abandonar sus hogares y que se quedan con poco o nada para sobrevivir”, dijo Bill O’Keefe, vicepresidente de relaciones gubernamentales e incidencia política de CRS. “A medida que proporcionamos las necesidades básicas y soluciones a largo plazo para estas personas inocentes, Estados Unidos debe utilizar todas sus herramientas, incluido el reasentamiento en terceros países, para apoyar a los más vulnerables entre nosotros”.

Históricamente, Estados Unidos ha sido el líder mundial en el suministro de ayuda humanitaria y el reasentamiento de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial. Este nuevo límite para los refugiados, junto con las propuestas del gobierno para reducir la ayuda extranjera que reduce la pobreza, corre el riesgo de dañar el liderazgo moral de los Estados Unidos.

“Los Estados Unidos no debe abdicar de su liderazgo ni socavar su capacidad para ayudar a los perseguidos y marginados en todo el mundo”, dijo O’Keefe. “La manera en que respondamos no solo influirá en la forma en que otros gobiernos se comprometen hoy en día, sino también en cómo las generaciones de personas desplazadas encontrarán protección, oportunidad y esperanza en el futuro”.

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Catholic Relief Services es la agencia oficial de la comunidad católica en los Estados Unidos para ayuda humanitaria internacional. La agencia alivia el sufrimiento y ofrece asistencia a personas necesitadas en más de 100 países, sin importar raza, religión o nacionalidad. El trabajo de CRS de ayuda y desarrollo se logra mediante programas de respuesta a emergencias, al VIH, salud, agricultura, educación, microfinanzas y construcción de la paz. Para obtener más información, visite crs.org o crsespanol.org y siga a CRS en las redes sociales: Facebook, @CatholicRelief, @CRSnews, YouTube, Instagram y Pinterest.

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19 de septiembre de 2018