BALTIMORE, MARYLAND, 25 de septiembre de 2020 – Catholic Relief Services (CRS) se encuentra entre más de media docena de organizaciones católicas de los Estados Unidos que han firmado una carta instando al Congreso a aprobar fondos de emergencia COVID-19. Este proyecto de ley abordaría adecuadamente las crecientes necesidades humanitarias aquí y en el extranjero.
“Si bien entendemos que existen diferencias sobre cómo proceder con el proyecto de ley de estímulo COVID-19, las muchas necesidades de la situación actual claman por ayuda”, dice la carta. “No hacer nada o retrasar, solo asegura que más personas sufran. Por lo tanto, los instamos a dejar de lado la política partidista y priorizar la vida humana y el bien común.”
“Acelerar las negociaciones garantiza que no se pierda un día más en brindar seguridad y esperanza a las personas necesitadas en el país y en el extranjero”.
Además de CRS, los firmantes de la carta incluyen la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés), Catholic Charities USA y la Asociación Católica para la Salud de los Estados Unidos.
“Durante los últimos seis meses, hemos visto el impacto devastador de COVID-19”, dice la carta. “Familias han perdido a sus seres queridos en nuestros hospitales; la gente está perdiendo empleos; ha aumentado la inseguridad alimentaria”.
“El personal de nuestros respectivos ministerios se ha enfermado o perdido la vida mientras sirvía con valentía en el terreno. Parroquias, escuelas y universidades han cerrado para mantener seguras a nuestras comunidades. Millones de personas a las que servimos en todo el mundo están cayendo más profundamente en la desesperación”.
Desde el inicio de la pandemia, CRS y sus socios han apoyado a las comunidades más vulnerables del mundo a través de programas que abordan la prevención de enfermedades. Al mismo tiempo, brindan alivio a los afectados por los efectos secundarios del virus, como la creciente inseguridad alimentaria.
Desde el verano, las conversaciones casi se han estancado sobre el próximo proyecto de ley de fondos de emergencia COVID-19 entre el Congreso y el gobierno. “Como católicos, estamos llamados a proteger a nuestros hermanos que sufren”, dijo Sean Callahan, presidente ejecutivo de CRS. “Como líderes católicos, es nuestra responsabilidad moral influir en las respuestas del gobierno que fomentan el bien común de todos”.
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